Vive entre nosotros en forma de estatua, el más joven liberal ahorcado por defender sus ideas. Joven y apuesto, este mariscal de campo fue delatado por conspirador liberal, detenido y procesado en Madrid. Para alejarlo de las Cortes fue condenado a 4 años de prisión en el Castillo de San Antón.
Pero un escultor quiso dejar retratado en forma de piedra a tan importante personaje y cuando quisimos saber quién era el artista, la noche, siempre furtiva, se nos echó encima. Pero mereció la pena porque la luz, a veces, sólo sabe iluminar el rostro de los valientes y este joven de 26 años lo fue.
Juan Díaz de Porlier nació en Cartagena de Indias allá por el año 1788. Apodado El Marquesito (eso es otra historia) fue gran militar en el campo de batalla. Siendo ya Mariscal de Campo no promulgaba con la idea de la Restauración del Absolutismo de Fernando VII y abogaba por restablecer ciegamente la Constitución de 1812 de la que era ferviente defensor.
Preso, hizo contactos para realizar un Pronunciamiento que efectuó el 17 de Septiembre de 1815, aquí en esta ciudad. Pero de camino a Santiago, ciudad siempre más afín al clero y reyes déspotas, fue de nuevo delatado y apresado y condenado a muerte para desgracia de la libertad.
En la víspera de su ejecución, escribió un carta de despedida a su esposa, Josefa Queipo de Llano, que reproduciremos una parte aquí: “Nada te aflija del género de muerte que me dan, porque ella no deshonra sino a los malos, a los buenos les cubre de honor y gloria.”
Ya subido en el cadalso, procuró que su pañuelo fuera entregado a su esposa con sus últimas lágrimas. Lo ahorcaron aquí, en O Campo da Leña, llamada así porque antaño aquí se comerciaba con ella. Y en ella ejecutaron a un defensor de la Constitución de 1812 y en ella, esta ciudad lo recuerda con gratitud y honores.
¿El escultor? Si miras bien entre los entresijos de la roca verás su firma. Y en ella hallarás al inconfundible Escudero.
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